Gracias

Muchas gracias a todos por leerme y por vuestro aprecio.
Voy a seguir escribiendo, sólo quiero probar en otros formatos. Podrá llevarme un año, tres o diez... lo que sea. No puedo asegurar que vaya a llegar, pero voy a saltar. Hasta siempre.

Explicarse



Nunca doy explicación ni hago aclaración alguna acerca de mis poesías y recientemente me han sugerido que podría añadir alguna nota a pie de página; una visión personal desde la universalidad de la poesía, para orientar al lector y que no se vaya por derroteros no previstos. Quizá sea un desperdicio, sí (el lector conocería detalles simpáticos y yo podría explayarme), pero no un error. Que cada uno interprete libremente desde su punto de vista es un riesgo que ya tenía asumido. Que alguien viaje al sol cuando yo imaginé el mismo destino alunizando, puede acabar resultando hasta gracioso y estimulante. Por el contrario, al delimitar con precisión se puede romper algún esquema muy válido e incluso alguna ilusión.
Pero no lo descarto del todo (huelga decir que de aceptar el reto -quizá puntualmente, nunca siempre- no sería un pie de página propiamente dicho, sería un añadido personal y más amplio).
En la poesía, en la antipoesía y en la prosa también, he acabado plasmando algunas veces un punto de vista algo pesimista respecto a esa excelencia difícil que está pero no está, que cuando la atrapas parece que se ha ido... Otras he acabado en el optimismo del extremo opuesto... Un extremo tan aparatoso como frágil, que ha sido asumido como real por buena parte de selectos lectores, exagerado en momentos estratégicos por los que saben escribir, y llevado al paroxismo por músicos, bohemios, locos... Pero una excelencia nunca puede ser artificial en la poesía, cuyo deber entre otros, es la lucidez. Más amorosa o alucinada, pero siempre lucidez. No me librará esta de caer en las oscilaciones de los péndulos. Sin embargo cada día estoy más convencido de que la excelencia con mayúsculas no se debe sino mayormente al hecho de ser buena persona (virtud indispensable, aunque no la única, y tan extensa que -estoy seguro de que estarán de acuerdo conmigo- está condicionada a muy pocas cosas).


Nota: finalmente, releyendo el texto, hay partes en las que ni yo mismo entiendo del todo lo que he querido decir. Bueno, pero algo hay que escribir... Y es que, a veces, no es nada fácil EXPLICARSE.

LLuvia



Aunque el pasado no importe

no queremos ser los conformes

que creyeron en los engaños aledaños

de la prosa que sufrimos.

Los días de lluvia

ya no nos entristecerán más

sin dejar de ser los salvajes

que lejos de todo equipaje

nos supimos amar.

Oración



En el vértigo de los días, algunas veces

lo que nos apasiona va perdiendo interés,

Dios del tiempo que estás tan, tan arriba

no dejes a ninguna alma así perder.

En el pasar de los años, a veces

la gente se va sumiendo en engaños,

Dios del tiempo que estás tan, tan arriba

no permitas en ninguna alma tales daños.

En el transcurrir del sentir, alguna vez

se vuelven uno amor y dolor,

Dios del tiempo que estás tan, tan arriba

no dejes nunca a ningún amor sin color.

En el discurrir cansado, a menudo

parece más el pasado que el futuro,

Dios del tiempo que estás tan, tan arriba

no permitas en nadie un sentir tan oscuro.

Quimera



Sencillez apacible

confianza serena,

la sincera humildad

siempre se impondrá

ante cualquier presunción.

Cuanto podrían aprender de ti

los que creen ser "algo"

en el lado oscuro,

competitivo e infame

de esta achatada esfera

a la que llamamos Tierra.

¡Y sin embargo resultas

tan frágil en apariencia!

más que los demás, diría...

(pero en el fondo como todos).

¡Qué contrastada combinación!

Necio, por un momento sentí

que tu confianza era porque

te sentías protegida a mi lado.

También en tu tristeza



Tu alegría me ayudó

a despertar, ver la luz;

y aunque hoy ya no estás

no quiero que dejes de saber

que también en tu tristeza

te he amado igual o más.

Cosas escritas



Todos los que creen comprender a Dios

entenderán algún día que ninguna religión

es obstáculo cuando de verdad se quieren dos...

Aunque ya está muy lejos la que tanto amé

no olvidaré que a través de su sonrisa

podía encenderme y entender

cosas escritas en el lenguaje del amor.